La vacuna candidata BNT162b1, desarrollada por Pfizer y BioNTech, ha demostrado una robusta respuesta inmunológica en un ensayo clínico preliminar realizado con 45 adultos sanos de 18 a 55 años. Así los desprende los datos publicados en la revista Nature. Según reflejan los mismos, los niveles de anticuerpos neutralizantes de los participantes fueron de 1,9 a 4,6 veces más altos que los de personas que habían sufrido la COVID-19.
Tal y como reporta el estudio realizado, los candidatos recibieron una dosis de 10 microgramos (μg), 30 μg, 100 μg o un placebo. Además, los participantes de los grupos 10μg y 30μg también recibieron una segunda dosis el día 21.
Según los datos provisionales del estudio clínico en fase 1/2, realizado para evaluar la seguridad, tolerabilidad e inmunogenicidad de la vacuna, la vacuna era bien tolerada. Además, la respuesta inmunológica aumentó con el nivel de la dosis y con una segunda.
Por su parte, los anticuerpos contra el SARS-CoV-2 consiguieron permanecer 21 días después de la primera vacunación en todos los niveles de dosis. De igual modo, se registró un aumento sustancial de los anticuerpos neutralizantes contra el virus siete días después de que se administrara la segunda dosis de 10 μg o 30 μg.
Efectos adversos
En este sentido, algunos participantes experimentaron en los siete días siguientes a la vacunación efectos secundarios de leves a moderados. Estos aumentaron con el nivel de la dosis, y las reacciones adversas más frecuentes fueron dolor local en el lugar de la inyección, fatiga, dolor de cabeza y muscular, escalofríos, fiebre y trastornos del sueño.
El informe de Nature reporta también que no hubo diferencias notables en la respuesta inmunológica entre los grupos de 30 μg y 100 μg tras la primera dosis. En este aspecto, y como los participantes que recibieron la dosis de 100 μg también experimentaron mayores efectos secundarios, estos no recibieron una segunda inoculación.
Mario Ruiz