La enfermedad psoriásica es una patología crónica, no infecciosa, del sistema inmune que puede manifestarse en la piel (psoriasis) y, en algunos casos puede aparecer en las articulaciones (artritis psoriásica) y que impacta negativamente sobre las emociones de los pacientes, generando ansiedad, estrés, baja autoestima y, en algunos casos, depresión.
Muchas personas creen que la psoriasis sólo afecta a la piel, y no son conscientes de que el dolor adicional en las articulaciones podría ser un signo de que se ha desarrollado la artritis psoriásica. De hecho, la psoriasis y la artritis psoriásica están estrechamente relacionadas.
Además, esta enfermedad puede cursar con dolor y ejerce un impacto negativo en la calidad de vida de los pacientes, afectando en la actualidad a más de 125 millones de personas en todo el mundo. La psoriasis llega a afectar a los aspectos más cotidianos de la vida de los pacientes y repercute en su normal desarrollo en el plano emocional, social y laboral. Frecuentemente, estos pacientes se sienten discriminados ante la reacción de rechazo de la sociedad lo que, unido a la falta de información, fomenta la percepción errónea de que la enfermedad es contagiosa.
Proporcionar información y conocimientos a los pacientes que viven con la enfermedad psoriásica, puede desarrollar su confianza y ayudarles así a desempeñar un papel más proactivo en el control de su enfermedad junto con su médico.
Por todo ello, la asociación de pacientes Acción Psoriasis, con el apoyo económico del laboratorio Novartis, han puesto en marcha la página web https://www.accionpsoriasis.org en donde los interesados disponen de información sobre esta enfermedad y consejos para el día a día y para para preparar la visita al médico.
(AZprensa)
Fuente: http://bit.ly/2Xc1tGF