Sinónimos: Ataxia con retinopatía pigmentaria
SCA7
Síndrome cerebeloso – maculopatía pigmentaria

Prevalencia: 1-9 / 1 000 000

Herencia: Autosómico dominante

Edad de inicio o aparición: Infancia
Adolescencia
La edad adulta
Senectud

 

Resumen

La ataxia espinocerebelosa de tipo 7 (SCA7), es actualmente la única forma conocida de ataxia cerebelosa autosómica dominante de tipo 2 (ADCA2; véase este término), y consiste en un trastorno neurodegenerativo caracterizado por ataxia progresiva, anomalías del aparato motor, disartria, disfagia y degeneración retiniana que conduce a ceguera progresiva.

La prevalencia estimada de la SCA7 a nivel mundial es inferior a 1/100.000, y se cree que es la responsable de entre el 2% y el 4% de todas las formas de SCA (hasta un 7% en las poblaciones asiáticas). En algunas poblaciones, como la escandinava o la sudafricana se ha descrito una prevalencia más alta.

El debut clínico de la ataxia SCA7 se produce generalmente entre la segunda y la cuarta décadas de vida, pero puede variar de la primera infancia a la sexta década de la vida. Las manifestaciones que se presentan en la primera infancia y la niñez incluyen debilidad muscular, deterioro, hipotonía, mala alimentación, retraso en el crecimiento y regresión de las habilidades motoras. Los cambios en la agudeza visual y la visión de colores (tritanopía) pueden ser los primeros síntomas de la enfermedad, especialmente en los pacientes con debut clínico más temprano. En los casos en los que los síntomas iniciales aparecen antes de la adolescencia, la enfermedad progresa mucho más rápidamente y se puede llegar a la ceguera en pocos años. En aquellos casos de aparición de la enfermedad en la edad adulta, las manifestaciones incluyen dismetría, mala coordinación y adiadococinesia, con una progresión hacia la disartria grave, la disfagia y la pérdida del control motor. Los síntomas visuales (hemeralopía, fotofobia, anomalías en la visión del color y en la agudeza visual central) pueden preceder, acompañar o seguir a la ataxia cerebelosa en los casos de SCA7 de aparición en la edad adulta, pero el curso de la enfermedad es más lento, y la ceguera se produce transcurridos 10 años o más desde la primera aparición de los síntomas. En algunos casos también se ha observado psicosis y deterioro cognitivo. Con el tiempo, los pacientes terminan postrados en cama.

La SCA7 está causada por una repetición del trinucleótido CAG en el gen de la ataxina 7 (ATXN7) (3p21.1-p12). Esta mutación provoca la degeneración de las células de la retina, el cerebelo y el tronco encefálico. Una expansión mayor de la repetición de CAG se asocia con una aparición más temprana y un curso de la enfermedad más grave.

El diagnóstico se basa en manifestaciones clínicas características (descoordinación motora progresiva y una retinopatía mixta que afecta a conos y bastones), y requiere una confirmación mediante un análisis genético molecular. Una expansión del trinucleótido CAG (que alcance o sobrepase las 36 repeticiones o más del triplete CAG) en el gen ATXN7 confirma el diagnóstico de SCA7. Las imágenes de resonancia magnética suelen mostrar atrofia grave del cerebelo y del tronco encefálico. Las pruebas de electrorretinografía revelan anomalías en los conos y los bastones, y el examen fundoscópico muestra cambios maculares en las fases más avanzadas de la enfermedad.

El diagnóstico diferencial incluye las enfermedades por depósito de lípidos (como las lipofuscinosis neuronal ceroideas) y la neuropatía óptica hereditaria de Leber (véanse estos términos). También se pueden considerar otras formas de ataxia espinocerebelosa autosómica dominante (véase este término), pero se pueden excluir en función de la presencia de degeneración retiniana, que es exclusiva de la SCA7.

El diagnóstico prenatal es posible en familias con una mutación conocida en ATXN7.

La SCA7 es una enfermedad autosómica dominante, en la que se puede observar un fenómeno anticipación genética (aparición más precoz de la sintomatología en las generaciones siguientes). En el asesoramiento genético se puede informar a los padres con la enfermedad de que tienen el 50% de probabilidades de transmitirla a sus hijos.

No existe un tratamiento curativo para la SCA7, pero existen tratamientos de apoyo. Se debe mantener la marcha en la medida de lo posible con ayuda de bastones y andadores. Con el tiempo pueden ser necesarias las sillas motorizadas. Se debe ofrecer logopedia y dispositivos de comunicación a los pacientes con disartria. Se debe limitar la exposición a los rayos UV y utilizar gafas de sol para minimizar las lesiones en la retina. También pueden ser beneficiosas las lentes correctoras. Es esencial realizar un seguimiento oftalmológico para vigilar la agudeza visual. La disfagia también se debe supervisar, y en casos de enfermedad avanzada puede ser necesario un tubo de alimentación con el fin de reducir el riesgo de neumonía por aspiración (que es la causa más común de muerte).

El pronóstico depende de la edad de aparición de los síntomas. Un inicio más temprano se asocia con un curso más grave y más rápido de la enfermedad.

 

 

Revisores expertos

  • Dr Shinsuke FUJIOKA
  • Dr Zbigniew WSZOLEK

 

 


Fuente: Orphanet (Ataxia espinocerebelosa tipo 7)