Sanofi Pasteur, la unidad global de negocios de vacunas del fabricante francés de medicamentos Sanofi, ha unido fuerzas con un departamento del gobierno de los Estados Unidos para desarrollar una nueva vacuna contra el coronavirus COVID-19.
La compañía farmacéutica dijo que trabajará con la Autoridad de Investigación y Desarrollo Avanzado Biomédico (BARDA), y utilizará la tecnología recombinante de Sanofi para acelerar el desarrollo de la vacuna.
En un comunicado, Sanofi Pasteur dijo que planea avanzar una vacuna preclínica originalmente diseñada para contrarrestar el coronavirus relacionado que causó el brote del síndrome respiratorio agudo severo (SRAS), que surgió a fines de 2002 y luego desapareció en gran medida en 2004.
Sanofi usará su plataforma de ADN recombinante para producir un nuevo candidato para la vacuna contra el coronavirus de 2019, pero no dio plazos para el desarrollo o los ensayos.
La tecnología recombinante produce una coincidencia genética exacta con las proteínas que se encuentran en la superficie de un virus.
La secuencia de ADN que codifica este antígeno se combinará en el ADN de la plataforma de expresión de baculovirus, la base del producto de influenza recombinante con licencia de Sanofi.
Esto se utilizará para producir rápidamente grandes cantidades del antígeno del coronavirus que se formulará para estimular el sistema inmunitario para proteger contra el virus.
En estudios no clínicos, el candidato a la vacuna del SARS produjo una respuesta inmune y proporcionó protección parcial cuando se probó en animales.
En diciembre, Sanofi también firmó un acuerdo con BARDA para establecer instalaciones de vanguardia en los EE. UU. Para la producción sostenible de una vacuna recombinante adyuvante para su uso en caso de una pandemia de gripe y basada en la misma plataforma tecnológica que se utilizará para el programa COVID-19.
La unidad Janssen de Johnson & Johnson también está trabajando con BARDA, parte del Departamento de Salud y Servicios Humanos de EE. UU., En una vacuna contra el coronavirus.
La semana pasada, J&J dijo que intensificará el trabajo con BARDA, contribuyendo a los costos de I + D durante las etapas iniciales de desarrollo de una vacuna COVID-19 separada.
Janssen dijo que aumentará su capacidad de producción y fabricación, utilizando las mismas tecnologías que se usaron con su vacuna experimental contra el Ébola, que actualmente se implementa en la República Democrática del Congo y Ruanda.
Richard Staines
Fuente: http://bit.ly/2vSifkz