Sinónimos:

Prevalencia: <1 / 1 000 000

Herencia: Autosómico dominante o No aplicable

Edad de inicio o aparición: Prenatal
Neonatal
Infancia

 

Resumen

El síndrome de Schinzel-Giedion (SGS) es un síndrome de displasia ectodérmica caracterizado por una dismorfia facial característica, hidronefrosis, un acusado retraso del desarrollo, malformaciones esqueléticas típicas y anomalías genitales y cardíacas.

Se desconoce la prevalencia del SGS al nacer. Hasta la fecha se han descrito más de 50 casos en todo el mundo.

Al nacer, el SGS se reconoce con facilidad por la dismorfia facial característica, que consiste en frente prominente, retracción Hemifacial con ojos hundidos que da la tìpica morfología en »8» del cráneo en los casos más acusados, y una nariz pequeña y respingona, así como anomalías viscerales e hipertricosis. La hidronefrosis está presente en prácticamente todos los afectados (91%). Son comunes las anomalías cardíacas, incluidos los defectos de tabique, displasias valvulares, ventrículos hipoplásicos y conducto arterioso persistente (43%), así como otras anomalías genitourinarias (76%) como criptorquidia, micropene, hipospadias, útero hipoplásico, hipoplasia de labios mayores y menores, surco labial profundo y ano anterior. Con frecuencia, los neonatos presentan extremidades cortas y con las siguientes malformaciones: pies valgos o varos, braquimelia mesomélica con uñas hipoplásicas e hiperconvexas, pliegue palmar único en las manos. Los neonatos afectados sufren hipotonía y se presentan típicamente con insuficiencia respiratoria, retraso grave del desarrollo acompañado de convulsiones (a menudo refractarias) y discapacidad visual y auditiva. Además, en pacientes con SGS se ha observado una prevalencia más alta de lo normal de tumores neuroepiteliales (17%).

El SGS está causado por mutaciones »de novo» en el gen SETBP1 localizado en cromosoma 18q21.1, resultando probablemente en un efecto de ganancia de función o en un efecto dominante negativo.

El diagnóstico se basa en hallazgos clínicos (incluida la dismorfia facial característica), presencia de hidronefrosis en la ecografía, y datos radiológicos de malformaciones esqueléticas típicas múltiples que incluyen esclerosis de la base del cráneo, sincondrosis occipital muy amplia, aumento del grosor o la densidad cortical y costillas anchas. Antes de los 12 meses de edad, las radiografías del cráneo revelan un hueco entre las dos partes del hueso occipital. Es posible realizar diagnostico genético mediante estudio de mutaciones en SETBP1.

Otras enfermedades con la retracción hemifacial característica que se podrían considerar en el diagnóstico diferencial son el síndrome fetal por hidantoína, el síndrome fetal por warfarina, el síndrome Zellweger, la mucopolisacaridosis, la gangliosidosis y la condrodisplasia punctata rizomélica, así como el hipotiroidismo congénito (véanse estos términos).

La hidronefrosis es detectable mediante ecografía prenatal entre las semana 18 y 37 de gestación en cerca del 40% de los casos afectados. Es posible realizar un examen genético prenatal.

El SGS es una enfermedad de transmisión autosómica dominante. Prácticamente todos los casos se producen de forma esporádica; la identificación del probando se debe realizar junto con el asesoramiento genético a los padres.

El tratamiento es de apoyo, y consiste en cuidados paliativos. Las principales complicaciones son la insuficiencia respiratoria, la intolerancia a los alimentos, las crisis convulsivas refractarias y la presencia de infecciones, tales como neumonía, de manera frecuente y recurrente.

El pronóstico es grave, y la mayoría de pacientes afectados no sobreviven a la primera infancia a causa de la degeneración neurovegetativa progresiva, el aumento del riesgo de desarrollo de tumores, las infecciones recurrentes y la insuficiencia respiratoria. No obstante, se han descrito casos de supervivencia hasta la adolescencia.

 

 

Revisores expertos

  • Pr Albert SCHINZEL

 

 


Fuente: Orphanet (Síndrome de Schinzel-Giedion)